¿Cómo se forman los tornados?
Introducción
Los tornados son uno de los fenómenos meteorológicos más destructivos que existe. Son nubes en forma de embudo que se extienden desde la base de una nube de tormenta hasta la superficie terrestre. Pueden surgir en cualquier lugar del mundo, pero son más comunes en la llamada "Alley de los Tornados", que se extiende desde el sur de Canadá hasta el norte de México, pasando por los Estados Unidos. En esta región, se producen más de mil tornados al año.
Composición de los tornados
Aunque los tornados varían en tamaño y fuerza, todos comparten la misma estructura básica. En el centro, hay una zona de baja presión conocida como "vórtice". Alrededor del vórtice, hay una serie de espirales que giran en sentido contrario a las agujas del reloj (en el hemisferio norte) o en el sentido de las agujas del reloj (en el hemisferio sur). Estas espirales son alimentadas por corrientes de aire que entran en el tornado.
Cómo se forman los tornados
A pesar de que los expertos en meteorología aún no entienden completamente la mecánica detrás de la formación de los tornados, hay algunas teorías generales. Una torrencial corriente de aire caliente y húmedo es esencial para la formación de un tornado. La corriente de aire caliente sube desde la superficie terrestre y se encuentra con una corriente de aire frío que desciende desde la atmósfera superior. Si estas corrientes de aire chocan en condiciones adecuadas, se crea un remolino.
A medida que el remolino se forma, el aire comienza a girar alrededor del vórtice del tornado. Conforme el tornado toma fuerza, las corrientes de aire más frías que lo rodean se desplazan hacia la base del tornado, lo que hace que la presión dentro del mismo disminuya aún más.
Esto a su vez atrae más aire húmedo y cálido hacia el tornado, lo que lo hace girar aún más rápido. Cuando el tornado finalmente alcanza la velocidad crítica, se forma una columna de vórtice entre el suelo y la nube de tormenta. Esta columna se compone de una serie de bolsas de aire que giran alrededor del vórtice.
Factores que contribuyen a la formación de tornados
Además de la corriente de aire caliente y húmedo, hay otros factores que pueden contribuir a la formación de tornados. Uno de ellos es la topografía. Los tornados son más comunes en áreas con una topografía plana, como la Alley de los Tornados.
La dirección del viento también juega un papel importante en la formación de los tornados. Los vientos fuertes y cálidos que soplan desde el sur son propicios para la formación de tornados en el hemisferio norte. En el hemisferio sur, los vientos cálidos y húmedos que soplan desde el norte son los más favorables.
Tipos de tornados
Los tornados se dividen en varias categorías, según su tamaño y fuerza. La escala Fujita, desarrollada por el famoso meteorólogo Ted Fujita, es una clasificación común. Es una escala de seis niveles que mide la severidad de los tornados según la velocidad del viento.
Un tornado de categoría F0 tiene vientos que van de 65 a 85 km/h, mientras que un tornado de categoría F5 tiene vientos que superan los 500 km/h. Los tornados de categoría F3 y superiores pueden causar una gran cantidad de daños materiales y son peligrosos para la vida humana.
Cómo detectar un tornado
Aunque los meteorólogos pueden detectar la probabilidad de que se produzca un tornado utilizando tecnología avanzada, como radares doppler, hay algunas señales más simples que los residentes pueden buscar. Los signos más comunes incluyen nubes en forma de embudo, un fuerte rugido o zumbido, y el sonido de objetos golpeando contra superficies duras.
Es importante seguir las instrucciones del gobierno y los servicios de emergencia en caso de una alerta de tornado. Busque refugio en el interior de una estructura sólida o en un refugio subterráneo. Si no hay terreno sólido disponible, acuéstese en un terreno bajo y proteja su cabeza con sus brazos.
Conclusiones
Los tornados son un fenómeno meteorológico fascinante, pero también extremadamente peligroso. Aunque los meteorólogos han avanzado bastante en la predicción de tornados, todavía hay mucho que aprender sobre su formación y comportamiento.
Es importante conocer las señales de alerta y seguir las instrucciones de los profesionales en caso de una alerta de tornado. Al estar preparados y ser conscientes de los peligros, podemos mantenernos a salvo durante los eventos meteorológicos extremos.